Mauricio es una isla volcánica que mide 58 kilómetros de norte a sur y 47 kilómetos de este a oeste, y está situada sobre el océno Indico, a unos 800 kilómetros de Madagascar y a otros 220 de su vecino más cercano, Reunión.

Con sus 600 habitantes por kilómetro cuadrado, Mauricio es uno de los países con mayor densidad de población del mundo. A Mauricio pertenecen también la isla de Rodrigues (a 560 kilómetros al noreste) y otros atolones coralinos como Cargados Carajos y Agalega.

A diferencia de la cercana Reunión, Mauricio no tiene volcanes activos, pero sus antiguas huellas se siguen apreciando en la isla, como es el cráter de Curepipe. El terreno en general es bastante llano, exceptuando la costa de la isla central, que se alza ligeramente para formar una fértil meseta central (no más de 500 m. de altura). Las islas menores quedan a unos 500 kilómetros al norte.

Largas playas de blanca arena y aguas coralinas abrazan la isla de Mauricio. Su exótica fauna permanece escondida en los bosques; más perceptible es la inmensa variedad de pájaros sobrevolando por el aire cálido y emitiendo sonidos tropicales. Sin embargo, muchas especies están en vías de extinción.

El clima de Mauricio es muy variado. Sobre una meseta, Curepipe tiene una temperatura unos cuantos grados más baja que en la costa. Es frecuente que esté lloviendo en Curepipe y que las playas estén gozando de un cielo raso, y viceversa. Del mismo modo, el clima de la costa este difiere de la costa oeste: la primera es más seca durante los meses de enero y febrero, mientras que los vientos provenientes del este provocan lluvias en el centro y el oeste de la isla.

No hay ninguna estación de monzones; no obstante los ciclones sacuden Mauricio cada 15 años aproximadamente, entre noviembre y mayo. Durante estos meses, suele haber días de fuertes lluvias que mantienen a la gente encerrada en sus casas. Los días más calurosos duran desde enero hasta abril, alcanzando los 35ºC. La época más fría es de julio a septiembre, cuando la temperatura media es de 24ºC durante el día, bajando a los 16ºC durante la noche. La humedad es mayor entre octubre y junio.

Además del pasaporte en regla, no es necesario ningún visado para estancias cortas (estancia máxima 3 meses). Los servicios de emigración estamparán en el pasaporte la fecha de entrada.

Embajada de España en Port Louis:
Cancillería: La de la Embajada de España en Pretoria (Sudáfrica).
Oficina Consular honoraria en Port Louis.

Cancillería: First Floor, Orchid Tower, 11, Sir William Newton Street. Port Louis
Tfno: (+ 230) 210.66.36
Fax: 230-211.99.20
Fax: (+ 230) 208.10.14

La moneda de Mauricio es la rupia, que equivale a 100 céntimos. El mejor lugar para cambiar divisas es, sin duda, el aeropuerto. Las tarjetas de crédito más conoidas suelen ser aceptadas, no así la Visa Electrón (sí la Visa). Advertencia: todo viajero debe probar que dispone de los medios suficientes para financiar su estancia en el país.

Las carreteras de Mauricio suelen estar en buen estado, pero las hay terrenosas y pantanosas. Quizás el mejor medio de transporte sea el coche, que se puede alquilar en cualquier ciudad grande o en el aeropuerto. También se pueden alquilar bicicletas y barcas cerca de la Grand Baie. Todo conductor debe poseer un permiso de circulación internacional, y en general, ser mayor de 23 años. Además, se aconseja estar más atento al conducir ya que se circula por la izquierda.

Uno de los placeres en el viaje a Mauricio es la magnífica mezcla culinaria. Las variedades más comunes son la criolla, la europea, la china y la hindú, siendo la especialidad casi siempre el marisco. Un buffet típico de Mauricio puede ser de biryani musulmán, pollo al curry hindú, cerdo agridulce chino, carne criolla y verduras al estilo francés. Todo acompañado de arroz hervido.

Otros platos frecuentes son la rougaille, un plato mediterráneo con tomate, cebolla, ajo y todo tipo de carne o pescado, y el daube, un guiso de pulpo. Entre las bebidas locales más populares está el famoso lassi, una bebida refrescante a base de yogur y agua fría, y también el alouda, una melosa mezcla de leche y otros sabores que edulcoran la vida en cualquier puesto de la calle. La cerveza y el ron de fabricación local son fuertes y baratos, no así los vinos, que son más caros, exportados normalmente de Francia o de Sudáfrica.

No hay vacunas obligatorias para Mauricio, ni se conocen vacunas recomendadas por el Ministerio de Asuntos Exteriores español. Mauricio no presenta riesgos de Malaria.

Según el Ministerio de Asuntos Exteriores, algunos medicamentos (tales como: Coproxamal, Di-antalvic) autorizados en España con receta médica están terminantemente prohibidos en Mauricio. Se aconseja tener a mano la receta médica y la caja original del fabricante del medicamento al pasar la inspección de aduanas.

Asimismo, el Ministerio advierte que la posesión y el consumo de estupefacientes está prohibido. Cualquiera que sea el tipo y la cantidad de la sustancia encontrada, el encarcelamiento es inmediato hasta el momento de comparecer ante la Justicia. Está igualmente prohibida la importación o la posesión de papel para liar tabaco.
La tasa de alcoholémia máxima tolerada es de 0,8 gramos por litros en sangre.

Aunque el nivel de delincuencia en Mauricio es bajo, han aumentado los casos de robos y asaltos. Los visitantes que alquilen casa o apartamento en la isla deben tener en cuenta que el número de asaltos a las casas ha aumentado notablemente. Los complejos hoteleros son mucho más seguros. Hay que tener cuidado con los bolsos y cualquier otra pertenencia de valor cuando se visiten las populares zonas turísticas de Grand Baie y Flic en Flac, o los mercados locales.